El impuesto turístico en Formentera

¡Hoy os traemos una actualización sobre el impuesto turístico vigente en Formentera!
Este “ecotasa” nace de la necesidad de salvaguardar y preservar el magnífico hábitat que caracteriza la isla de Formentera, y debe ser pagada por todos los turistas que visiten este rincón del paraíso.
En particular, este impuesto se ha concebido para hacer frente a las consecuencias del turismo sobre el territorio, las infraestructuras y los servicios básicos.
Los ingresos recaudados se destinarán a proyectos turísticos y medioambientales.
El organismo encargado de la recaudación son, por ahora, los alojamientos turísticos, aunque la normativa no descarta que en el futuro también los puertos y aeropuertos puedan asumir esta función.
En cuanto al coste, el importe varía según el tipo de alojamiento elegido.
Desde enero de 2018, las tarifas establecidas son las siguientes:
- Hostales: 1 euro + IVA (10%)
- Hoteles de 1, 2 y 3 estrellas: 2 euros + IVA (10%)
- Hoteles de 3 estrellas superior y 4 estrellas: 3 euros + IVA (10%)
- Hoteles de 4 estrellas superior, 5 estrellas y 5 estrellas superior: 4 euros + IVA (10%)
El importe se reduce a la mitad a partir del octavo día de estancia, y el pago se realiza directamente en el alojamiento, al llegar o al salir.
Están exentas del pago de esta tasa las siguientes personas:
- Menores de 16 años
- Personas que viajan con programas para la tercera edad
- Familiares de pacientes que necesiten desplazarse entre islas por motivos médicos
También los residentes en las Islas Baleares deberán pagar la ecotasa si viajan y se alojan en una isla distinta a la de su residencia habitual.
A diferencia de Cataluña, en otras regiones donde existe este tipo de impuesto, la oferta turística es muy distinta a la de las Baleares.
Se trata de grandes destinos urbanos, como Bruselas, Florencia o París, que poco tienen que ver con el sol y las playas que caracterizan nuestro archipiélago, y cuyos competidores mediterráneos no exigen ningún tipo de tasa.
Tal y como ha declarado el Govern Balear:
“los ingresos obtenidos con este tributo se destinarán a fomentar un turismo sostenible y a la conservación de los espacios naturales”.
Una comisión parlamentaria, con representación de los diferentes partidos políticos, asociaciones sectoriales y sindicatos, será la encargada de decidir el destino final de los fondos recaudados.